Cuando el viajero llega a Los Cabos lo hace con algunas ideas preconcebidas. Hoteles de lujo, playas paradisiacas y el lugar en el que disfrutar de las ballenas jorobadas. Y sí, Los Cabos es eso, pero también mucho más: parajes de ensueño, la combinación de un paisaje desértico que se funde para dar paso a un vergel, aguas cristalinas en el conocido como ‘acuario del mundo’ y un sentimiento único: ser choyero. Y es que así se denomina a las personas que nacen en Baja California Sur, debido a la cantidad de choyas (una especie de cactus) que salpican el terreno.
Viajar | Leer nota