Carmen Sánchez Contreras, habitante de La Ribera, fue la segunda participante en exponer su postura respecto al proyecto de Cabo Dorado, quien manifestó que se tiene que llegar a algún arreglo que convenga a todos y no solo a cierta parte, pues, si bien los habitantes necesitan desesperadamente empleo, para así poder sacar adelante a sus familias, tampoco quieren que resulte afectado el medio ambiente.
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